OSTA: 18 años de sindicalismo aragonés

OSTA: 18 años de sindicalismo aragonés

El 25 de mayo celebramos nuestro aniversario, dieciocho años de lucha de una organización sindical que nació en pleno en S.XXI, cuando muchos creían que no había espacio para un sindicato aragonesista y de clase.

Mujeres y hombres de Aragón entendieron que había que cambiar el rumbo de las cosas e hicieron posible OSTA, un sindicato de clase y aragonesista, buscando el sueño de un Aragón más justo y solidario. A todos ellos y a ellas debemos que OSTA sea un movimiento de masas en constante crecimiento; contando en estos momentos con más de 600 representantes sindicales en Huesca, Teruel y Zaragoza.

Nuestra organización se funda en el año 2002, con un panorama sindical caduco, institucionalizado y obsoleto. Durante estos años nos hemos enfrentado a las dos mayores crisis de la historia reciente y en ellas el sindicato ha sido capaz de dar respuestas a la clase trabajadora aragonesa, demostrando que OSTA es una herramienta útil para defender y mejorar la vida de las personas que viven y trabajan en Aragón, vengan de donde vengan.

Nacimos en un momento en el que el trasvase del Ebro era una de las grandes luchas de la sociedad aragonesa y desde nuestros inicios el Agua fue una de las reivindicaciones del sindicato, participando en su defensa en las manifestaciones de Zaragoza, Amposta y Bruselas.

Las infraestructuras y en especial la reapertura del Canfranc, a fecha de hoy siguen siendo dos de las apuestas más importantes del sindicato para Aragón. El Canfranc además de suponer una salida directa a Europa, vertebraría nuestro territorio, creando empleo en zonas castigadas por la despoblación.

Trabajamos por impulsar la figura del Justicia de Aragón y lo que representó, siendo el 20 dAviento uno de los días importantes en nuestra agenda, haciendo de este día una jornada por los derechos y las libertades del pueblo aragonés.

Exigimos que las condiciones laborales de los y las aragonesas se negocien aquí, porque solo nosotras y nosotros somos conocedores de lo que pasa en nuestro País y no debemos permitir que los sindicatos estatales desvirtúen la negociación colectiva trasladándola a Madrid, evitando así que los trabajadores y trabajadoras de Aragón puedan decidir sobre su futuro.

Nuestro proyecto sindical desde su fundación, ha pasado por momentos de toda índole, como le sucede a cualquier organización que se enfrenta a grandes retos, pero siempre hemos salido airosos porque los y las afiliadas de OSTA siempre han dado la cara, confrontando y con rigor sindical.

Durante el año 2020 hemos superado nuestro techo histórico en representatividad, siendo el sindicato que más ha crecido en este último periodo electoral, lo que reafirma nuestro proyecto sindical; basado en la afiliación, lo que nos hace fuertes e independientes en nuestras decisiones, y en la Información, la transparencia y la cercanía, porque los y las trabajadores deben sentir que el sindicato es la herramienta para la consecución de nuestros objetivos.

Las organizaciones sindicales debemos estar en constante proceso de adaptación; esta crisis sanitaria nos lo ha vuelto a demostrar. En estos momentos de nada valen las macroestructuras sindicales que no dan respuestas reales a los problemas de la clase trabajadora, que con el beneplácito de las instituciones continúan apostando por el mal llamado diálogo social, que solo ha supuesto recortes y perdida de derechos, reforma tras reforma.

Desde OSTA creemos que es necesario otro modelo sindical en el que la independencia, la confrontación y la participación, tienen que ser los ejes sobre los que pivoten las relaciones laborales, porque de no ser así, el capitalismo seguirá avanzando y las personas y el planeta dejaran de estar en el centro del debate.

Pasará el tiempo y las personas, pero cuando nos pregunten quien impulso OSTA y como fue, la respuesta será: “todos y todas lo hicimos, todas y todos fuimos líderes en la construcción de un sindicato de clase y aragonesista para el Aragón que soñamos”.

Por Aragón, unidos somos más fuertes. Manifiesto 1º de Mayo de 2020.

Por Aragón, unidos somos más fuertes. Manifiesto 1º de Mayo de 2020.

Ante las medidas de confinamiento decretadas por el Gobierno del Estado español, hacemos un llamamiento a la clase trabajadora aragonesa, para que salga a las 12:00 horas a sus balcones a revindicar el 1º de Mayo, aunque este año de una forma especial, dada la imposibilidad de reunirnos para reivindicarlo como siempre en las calles.

Por Aragón, unidos somos más fuertes.

Nos encontramos ante el primero de mayo más atípico de la historia contemporánea.

En este 1º de Mayo, Día Internacional de los y las Trabajadoras, debemos recordar a quienes dando la cara en sus puestos de trabajo, han contraído el virus. Y a todas aquellas que han fallecido por la enfermedad, su esfuerzo será recordado como ejemplo de lucha desinteresada y siempre permanecerá en nuestra memoria.

Gracias a ellos están haciendo posible que nuestro País siga funcionando, aunque en muchos casos suponga exponer su salud y la de sus familias, debido a la falta de Equipos de Protección Individual adecuados o al incumplimiento por parte de algunas empresas de los parámetros de seguridad establecidos.

La clase trabajadora está en primera línea de la crisis sanitaria. Está asumiendo la peor parte, poniendo en riesgo su propia salud, al ser la fuerza laboral que soporta mayor riesgo de contagio en sus respectivos puestos de trabajo. También está en riesgo su futuro laboral y económico, si no se toman las medidas adecuadas para afrontar la más que previsible crisis económica derivada de la pandemia.

Esta crisis sanitaria que estamos atravesando ha puesto de manifiesto que nuestra sociedad debe poner a las personas en el centro. Muchos de esos trabajos, que hoy por fin denominamos esenciales, son trabajos precarios, a tiempo parcial y mal remunerados. Pero en momentos como éste se pone en evidencia el enorme valor social que tienen muchos trabajos del sector de servicios, especialmente todos los trabajos relacionados con los cuidados, realizados a día de hoy mayoritariamente por mujeres.

Una vez más, como ya ocurriera en la crisis económica de 2008, la Unión Europa está volviendo a demostrar que no es capaz de dar respuestas y alternativas a la ciudadanía. Su prioridad son los llamados mercados, erradicando la soberanía de los estados que la componen y agudizando las desigualdades entre la Europa del sur y del norte, evidenciando una vez más que es una mera unión comercial entre países. La respuesta que puede provocar esto no es tampoco nada halagüeña si la ruptura de ese modelo viene liderada por corrientes de extrema derecha.

Los últimos movimientos del Estado español muestran una recentralización en la gestión de los servicios esenciales durante esta crisis. La posibilidad de que dicha recentralización no sea algo coyuntural debe mantenernos alerta, por la negativa repercusión que podría tener en territorios como Aragón. No podemos tampoco olvidar que los distintos gobiernos que se han ido sucediendo en el Estado español han aplicado políticas salvajes de privatización de servicios esenciales como la sanidad, las residencias, las energías, el transporte o el agua. Todo ello con el objetivo de seguir acumulando beneficios en unas pocas manos a costa del esfuerzo y la precarización de las clases populares.

De esta crisis debemos obtener numerosas conclusiones, pero la más importante es que los sectores de servicios públicos y estratégicos no pueden depender de la rentabilidad económica que unos pocos puedan extraer de ellos. La rentabilidad principal de los servicios públicos debe ser la social, y eso sólo puede garantizarse con una gestión pública y con la concienciación y participación de toda la sociedad.

En Aragón es el momento de que nuestro gobierno cambie de rumbo y apueste decididamente por lo público; por la gestión directa de los sectores estratégicos, por una banca pública que garantice el empleo y la subsistencia de autónomos y de la pequeña y mediana empresa; es momento de poner en marcha un plan de reindustrialización para nuestro País que tenga en cuenta las nuevas circunstancias del mundo actual globalizado y de la emergencia climática.

La anterior crisis ya puso de manifiesto que una economía diversificada es más estable frente a las crisis y que la investigación y el desarrollo de las nuevas tecnologías, junto con la formación, son fundamentales para la creación de puestos de trabajo de alto valor añadido, con sueldos y condiciones laborales dignas.

En cuanto a la negociación colectiva, esta crisis ha puesto de manifiesto que es necesario que las condiciones de los y las trabajadoras se negocien en Aragón. La recentralización de la negociación ha supuesto que muchos convenios que afectan a los y  las trabajadoras de servicios esenciales son convenios de ámbito estatal y en algunos casos llevan años sin negociarse.

Exigimos la revisión de estos convenios y trasladar su negociación a Aragón porque, nosotros conocemos la realidad de los sectores y de nuestro territorio mejor que otros a más de 300 kilómetros y seremos capaces de mejorar las condiciones laborales.

De poco valdrán los reconocimientos públicos de estos días si los convenios y las condiciones de los y las trabajadoras de servicios esenciales no se adecuan al trabajo que realizan y al valor que aportan a nuestra sociedad.

Es la oportunidad de construir las bases para el Aragón que queremos, es necesario una reversión a la gestión pública de sectores como el agua, la energía, el transporte o la educación, es momento de que nuestros políticos den la talla y defiendan lo nuestro, es momento de que la administración apueste decididamente por las personas de nuestros barrios y nuestros pueblos sin dejar atrás a nadie. Solo así podremos a Aragón y a sus gentes en el que sitio que se merecen.

En recuerdo de nuestro compañero Eloy

En recuerdo de nuestro compañero Eloy

Ayer 27 de abril falleció nuestro compañero de OSTA Eloy, trabajador del sector de la limpieza del Hospital Miguel Servet de Zaragoza por Covid 19.

Desde OSTA queremos mostrar nuestras condolencias a su familia y brindarle nuestro apoyo en estos momentos tan duros.

La labor prestada por Eloy en nuestro sindicato desde su fundación en el año 2002 ha sido muy importante; fue representante legal de los trabajadores en el Comité de Empresa de Limpieza en Opel, miembro tanto del Consejo Nacional, como del Comité Nacional de OSTA.

Desde el sindicato queremos destacar su participación activa en las negociaciones de los Convenios Colectivos del Convenio provincial de la Limpieza en la provincia de Zaragoza donde aportó ideas y trabajo para dignificar el sector y avanzar en derechos, siendo un baluarte en las negociaciones del Convenio.

Desde hace algún tiempo trabajaba en el Hospital Miguel Servet de Zaragoza, realizando esa labor de limpieza a veces invisible pero necesaria para el correcto funcionamiento de los hospitales diariamente.

Sirvan estas líneas para rendirte homenaje compañero, por tu labor diaria, por tu gran corazón, por tu ayuda y sobre todo por ser un ejemplo a seguir.

Siempre te recordaremos.